En las faldas del imponente cerro Pico Blanco se encuentra nuestro sexto camposanto, La Piedad Escazú, un lugar que fue establecido en 2013 y que ofrece una capacidad para 6,500 lotes. Este sagrado espacio se presenta como un santuario de paz y belleza natural, donde la serenidad se fusiona con la majestuosidad de la mejor vista a la capital.

Con el propósito de brindar un servicio integral a las familias en sus momentos de pérdida, inauguramos nuestra funeraria en 2016. Este espacio, inspirado de empatía y compasión, busca ser un lugar cálida para despedirse de sus seres queridos.

La Piedad Escazú se distingue por sus elementos distintivos, como los árboles de vida y cenizarios, que ofrecen opciones significativas para aquellos que buscan honrar y recordar a sus seres queridos de una manera especial. La presencia de estos elementos en el entorno natural del cerro Pico Blanco contribuye a crear un espacio único, donde la conexión con la naturaleza se entrelaza con el recuerdo y la memoria. En La Piedad Escazú, aspiramos a ser un refugio de serenidad y consuelo para quienes buscan paz en tiempos difíciles.